El pasado 24 de octubre fue el día mundial contra el cambio climático y en la ría de O Burgo se encuentra un ejemplo de iniciativa para paliarlo, ya que se está logrando la reducción de la contaminación y la limpieza de sus aguas. Se está llevando a cabo un trabajo de higienización de la ría que supondrá la recuperación a su estado natural de una zona muy característica de A Coruña.
Este proyecto sostenible tiene lugar en el área donde confluyen los municipios de A Coruña, Culleredo, Cambre, Oleiros y repercutirá en los casi once kilómetros de paseo que bordean la ría, además de mejorar la calidad de la playa de Santa Cristina.
Los alrededores de la obra, que son transitados por numerosas personas que se desplazan entre los cuatro ayuntamientos a diario, ha sufrido durante años vertidos industriales y urbanos que han contaminado sus aguas produciendo un impacto visual negativo y dañando a las especies que habitan este entorno.
La concesión de la obra está asignada a la Unión Temporal de Empresas O Burgo, conformada por Acciona y MAB Obras Públicas, junto con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) como promotor.
Para llevar un seguimiento del proyecto, se está realizando un informe mensual que incluye un resumen de los trabajos realizados en la ría, así como de la inversión de más de 32 millones para este proyecto que se extiende hasta 2024.
Trabajos en la Ría de O Burgo
Para el dragado de la Ría do Burgo se emplean herramientas especializadas, personal experto y medios específicos que permiten llevar a cabo esta tarea con éxito. Entre los materiales utilizados destacan las boyas de medición de turbidez, que han analizado durante meses el estado del agua de la ría.
Otro elemento importante para apoyar la realización de los trabajos es la barrera anti turbidez, cuya función es la de proteger la flora y fauna marina de los sedimentos trasladados por las operaciones de dragado. Además, para evitar la interferencia en la vida de las especies que habitan la ría, se van a preservar los hábitats de aves invernantes y los campos de fanerógamas, conformados por 227.310 metros cuadrados, existentes en las marismas.
También se ha tenido en cuenta la contaminación acústica producida por los trabajos, y para evitarla se han instalado barreras anti-ruido. Estas estructuras de hormigón evitan que la obra pueda ocasionar molestias a los transeúntes y habitantes de los alrededores de la ría.
Los trabajos de trasplante de tepes fueron realizados por 60 operarios, mariscadores y mariscadoras de la Cofradía, que replantaron 8.000 tepes de muy alta intensidad, unos 2.000.000 de ejemplares de Zostera noltii.
Dragado de sedimentos
El drenaje de las aguas de O Burgo se está realizando con un sistema de tuberías, fabricado en polietileno de alta densidad (PEAD) y diseñado específicamente para este proyecto, con un diámetro de 355mm y una longitud de 400m, que está montado sobre carretes.
Además de drenar los materiales contaminados de la ría, el sistema de tuberías de polietileno restituirá sedimentos libres de contaminación que permitirán restablecer las aguas y fondos originales. Esto favorecerá la recuperación, productividad y calidad de los bancos marisqueros, además de potenciar el uso recreativo de la ría.
Polietileno: beneficios del su uso en el dragado de la Ría de O Burgo
El uso del polietileno en los trabajos del proyecto en la Ría de O Burgo presenta las siguientes ventajas:
- Gran resistencia: La resistencia a la presión interna y condiciones extremas de las tuberías de polietileno es clave en trabajos como el de la ría de O Burgo por la presencia de agua marina y por las condiciones de la marea.
- Ausencia de corrosión. . En las tuberías de PE no existe corrosión, por lo que no se forman incrustaciones que permitan que las bacterias puedan residir y multiplicarse, según los criterios establecidos en RD 865/2003 sobre prevención y control de la legionelosis.
- Flexibilidad y adaptación. Gracias a su elasticidad el proceso de instalación es sencillo y barato y, además, se adapta perfectamente al entorno natural de la ría, con las variaciones del nivel del agua provocadas por la marea.
- Resistencia a la abrasión provocada por el trasvase de sólidos en suspensión.
- Reciclaje. Las tuberías de polietileno pueden recuperarse para otros usos y darle así una nueva vida útil al material siendo una solución a la contaminación y al cambio climático.
El dragado de la ría de O Burgo es un ejemplo de proyecto de colaboración público-privada posible gracias a la cooperación de MAB, Acciona, y el MITECO. Se trata de un proyecto que busca la recuperación ambiental de un espacio natural protegido, un reto que en ABN asumimos con muchas ganas, contribuyendo a los objetivos de sostenibilidad que promovemos desde la compañía en línea con la Agenda 2030.