Existen muchos factores importantes en el día a día de los seres humanos, pero solo algunos son vitales para su supervivencia. Pues bien, el agua va más allá, su relevancia es tal que el propio cuerpo humano está formado, en un altísimo porcentaje, por H2O. La Guerra de Ucrania ha desencadenado una grave crisis energética que está dejando de lado en los principales medios el grave estado del agua en nuestro país y en el mundo. Este año las reservas de los pantanos están en mínimos históricos, estamos en cifras del siglo pasado. La falta de agua, acompañada de la subida de temperaturas global (seguimos aumentando un grado y medio anual) acrecienta el valor de quien sí dispone de un bien tan preciado como el agua. La problemática no se queda ahí, el aumento de la temperatura también está derritiendo los casquetes polares, provocando una gran disminución de la cantidad de agua dulce en el mundo, la que más consume el ser humano y que obtenemos principalmente de pantanos y el subsuelo.
No existe una forma única de afrontar todos los riesgos que implica la falta de agua en el “Planeta Azul”, pero sí debe haber un cambio en el paradigma en el que vivimos para afrontar esta situación, y debe ser en todos los ámbitos y sectores. Para reivindicar el valor del agua, cada año se celebra la Semana Mundial del Agua, que en esta ocasión tendrá lugar en el Stockholm City Conference Centre de Estocolmo bajo el lema: «Ver lo invisible: el valor del agua«. Desde ABN, para acompañar esta semana tan especial entre el 23 de agosto y el 1 de septiembre, hemos querido traer varios proyectos constructivos que tienen al agua como protagonista:
La casa flotante
Un barco puede convertirse en una casa flotante, pero ese no es el objetivo de su construcción. E diseñador Dymitr Malcew quiso crear una edificación que tuviera la libertad de movimiento de una embarcación de cercanías, pero poder sentirse como en casa. Para ello creó esta maravilla de la arquitectura, que se sustenta en una base flotante con gran capacidad de movimiento para modificar su ubicación, al mismo tiempo que dispone del equipamiento necesario para acoplarse en un puerto cercano.
También dispone de un sistema de anclaje que evita los micro movimientos que podrían hacer la casa inhabitable. Todas las estancias de la vivienda tienen accesos directos la terraza que bordea esta casa-isla. Su construcción evoca la estrecha relación que existe entre el ser humano y el agua, el hogar de una persona es solo una prolongación de la zona acuática donde se encuentre estacionada la casa.
Hotel Water Discus
Explorar el mundo subacuático hasta hace bien poco estaba limitado a las exploraciones submarinas bajo el agua con gafas y oxígeno. Pero la experiencia es muy diferente si ese extraordinario paisaje del subsuelo marino puede observarse desde el cómodo sillón de una habitación submarina.
Gracias a la tecnología actual, la promotora Deep Ocean Technology Poland | Underwater technologies of the future ha conseguido construir un hotel que sale al exterior para la entrada de sus huéspedes y se sumerge en las profundidades para el resto de la estancia. Se trata de un proyecto diseñado por la nombrada constructora con financiación de la UE, así como en colaboración continua con científicos e ingenieros de la Facultad de Ingeniería Oceánica y Tecnología de Buques, la Universidad de Tecnología de Gdansk, así como otras instituciones científicas y de I + D.
La Casa de la Cascada
En este caso hablamos de una de las grandes obras de la construcción orgánica, diseñada por el arquitecto Frank Lloyd Wright. Fue erigida entre 1934 y 1936 y ha sido la base para gran parte de las edificaciones actuales en cuanto a sus valores orgánicos y sostenibles. Toda la casa está pensada para poder convivir de forma armónica con el paisaje.
La gran protagonista de la vivienda, como su propio nombre indica, es la cascada que recorre su interior, escenificando una unión entre construcción y naturaleza evidente. El mayor problema de la Casa de la Cascada, ópera prima de Lloyd Wright, es que es inhabitable: el continuo ruido y goteo que provoca el paso del agua de la cascada hace inviable residir de forma permanente. A pesar de que la edificación no puede ser utilizada como vivienda habitual, es un lugar de peregrinación para cualquier buen arquitecto que quiera aprender sobre los orígenes de la arquitectura orgánica en perfecta convivencia con la naturaleza.
Resort Poseidón
Parece que se está convirtiendo en algo habitual construir debajo del agua, pero nada más allá de la realidad, los dos complejos que os acercamos son vanguardistas y singulares. El Resort Poseidón tiene tres opciones diferentes de hospedaje:
- Una suite con playa privada y acceso directo al mar.
- La habitación flotante, donde se puede disfrutar, como si de un barco se tratara, de navegar con las mejores comodidades.
- La tercera y más espectacular consiste en bajar hasta alguna de las suites que tiene el resort a 12 metros de profundidad. La estancia submarina cuenta con grandes ventanales, zonas de ocio y un lujoso restaurante, donde se puede deleitar de unas lujosas vacaciones acompañados por la inmensidad del océano.
El agua es parte intrínseca de nuestra vida, y debe poder seguir siéndolo, por eso celebramos cualquier iniciativa que quiera profundizar en la relación entre el agua y el ser humano, y si el carácter de ese proyecto es sostenible y ecofriendly, mucho mejor. La Semana del Agua es la semana de todos, por lo menos de un 70 por ciento de cada uno de nosotros, es un gran momento para reflexionar sobre las necesidades que tiene el agua y qué se puede hacer para cumplirlas, ya que será una labor para la propia humanidad.